El otro día estaba en mi trabajo dando clases en uno de los tantos cursos que tengo y el tema del día era las Ventajas y Desventajas del uso de las Nuevas Tecnologías... estaba explicando el alcance de estas NTIC en todas sus dimensiones, en lo social, en lo institucional y sobre todo en lo comunicacional.
El tema paso de ser interesante a muy participativo, tanto que con los chicos terminamos hablando de las relaciones humanas y como se ven afectadas por el uso extremo e intensivo de estas.
Fue tanto la concentración y el entusiasmo de todos (incluido yo) por conocer, intercambiar y debatir sobre el tema, que llegado un punto un alumno me dijo..."profe... y ud como se divertía?.
Debo reconocer que siempre exagero a la hora de hablar de mi (una forma irónica de agrandar y exagerar con el ánimo de causar gracia), siempre trato de hacerles ver lo bueno y lo positivo de cada cosa que he vivido o que me contaron para que ellos aprendan y lo tomen.
Pero ese día mi cara se transformó, una gran sonrisa dibujo mi cara, mis ojos se achicaron como haciendo fuerza para divisar algo distante en el horizonte.
Mis sentidos se agudizaron y rápidamente se trasladaron a El Portezuelo del 84´, 85´, 86´ cuando yo tenía entre 6 y 9 años de edad.
Me vi entre los montes verdes de la Loma poniendo una trampera para cazar las medianas y hacer que la mami me haga ese guiso de paloma que tan rico es.
Y como si fuera algo natural e innato comencé a relatarles de como nosotros siendo niños nos divertíamos en esos laaaargos y calurosos veranos.
¿CÓMO NOS DIVERTÍAMOS??.... después de unos segundos y con la cara de asombro como diciéndome dele apurece, cuente!!!.
Les dije: " Cuando yo era chico... hace mucho, (jaajajajajaa las risas de los chicos haciéndome burla) no existía la play, no había celulares, la internet????? puffffffff que era eso!!!!.
Los días eran largos y divertidos, sin preocupaciones, sin presiones de que si llego o no al otro nivel.... si tengo para recargar credito o no.....
La presión no existia en nuestra infancia, por que el mundo giraba a otra intensidad, a otra velocidad... en fin la Tecnologia solo era sinonimo de ciencia ficción y solo era para las peliculas que podiamos ver en canal 12 o 9 de la Rioja o el 7 de Santiago del Estero.
La creatividad, la imaginación, el soñar despierto era nuestros unicos vicios.... nuestras herramientas para que el día tenga un sentido.
Salir a ondear a la siesta por los montes de atrás de la loma, en la arboleda de los Días o por el río eran incansables caminatas en medio del calor pero que no dejabamos de hacer.
El jugar a la pelota, (de medias o trapos) eran finales, finales donde eramos los mejores del mundo, con los mejores goles del mundo y donde los partidos se transformaban en batallas épicas que seguían despues en la escuela con los comentarios y discusiones.
Tambíen jugar a los COWBOYS en la sala a la siesta cuando todos dormían era un placer solo nuestro..... con dos bandos en el que uno se escondia y el otro salía a su caza, conviertiendose en batallas inimaginables de destrucción por el poder atrós de nuestras armas de última generación cuyo material de fabricación y diseño propio era extraído del cañaveral del Tío Coco. Rambo era un bebe de pecho comparado con nuestros equipos y habilidades de vigia y ataque.
Las batallas duraban horas, tanto era la concentración en el juego que sólo dejabamos de jugar cuando ya no veíamos nada; entonces sólo firmabamos la tregua para el otro día....otro día de en la que la imaginación y la creatividad no tenía límites.
Pensar en que nos ivan a comprar un autito de juguete??? noooooooooo era carisimo!!!! pues entonces los fabricabamos, a partir de un trozo de madera, ocho latas de picadillo que en ese tiempo habia por todos lados unas latas de arbejas podiamos armar los mejores autos de rally con ejes y dirección movibles, la pubilicidades eran autenticas propagandas de cigarrillos, marcas de autos, filtros, aceites y cualquier otro producto que tenga una etiqueta que pueda ser recortada.
El circuito era uno de los peores y extensos del mundo!!!! hasta usabamos esos relojes con segunderos para cronometrar y ver quien ganaba la etapa.
La guerra de terrones era lo máximo, ver como nuestros cohetes eran lanzados e impactaban con semejantes explosiones en el cuerpo de nuestros enemigos era increíble, increible era las retadas y hasta alguna paliza (sobre todo los domingos, ya que nos bañaban temprano por que el otro día habia escuela) eran mascres indescriptibles que se llevaban a cabo en el arroyo de la abuela... un bando en las breas y los otros desde la loma....jajajajajajaja de solo recordarlo me rio de las caras cuando eramos impactados con un terronazo, las risas de todos nosotros y tambien apurarnos a cubrirnos para que no nos peguen...
Y así trasncurrían los días en El Portezuelo, días que se hacían semanas....que se hacían meses.... hasta que las motivaciones, los juegos empesaron a cambiar, no por que no aburrieran, si no por que esos niños que pasaban sus días de su infancia con tan poco pero con tanta imaginación, de a poco se hicieron grandes...
y que a más de uno se acuerda de aquellos días dibujandoles una sonrisa picaresca y nostalgica de aquellas hermosas épocas que ya no volverán.
